Playmaker

CLIENTE Playmaker
Edad del cliente: 29

LUMI
Nombre "artístico": Judith
Nacionalidad: (u origen probable) Catalana
Edad: (aparente y/o anunciada) Aparente, 28. Anunciada, 25.
Descripción física: (¿fotos reales/retocadas?) Reales, aunque el fotógrafo hizo bien su trabajo
Valoración física de la chica: 8,5. Delgada, 170 cm, pecho bien operado. Muy guapa de cara y muy buen cuerpo. Chica que cuando vas por la calle no puedes dejar de mirar.
Vestimenta: De calle: tejanos y jersey rojo de cuello alto
Fumadora: Si, pero no lo noté por sus besos...

CONTACTO
Teléfono: 622573179
Web/Anuncio: Bella Dona - Escorts Barcelona - Escorts de lujo - Relax Barcelona
Dirección: (¿se aparca fácil?) Apartamentos Betrés (C/ Breda, 3 de Barcelona). Hay parking de pago relativamente cerca.
Horario: 16:30 - 17:30

LUGAR DE ENCUENTRO
Ambientación/decoración: Habitación correcta, en la planta baja, con una bañera-jacuzzi que habrá vivido escenas muy tórridas
Valoración: 7,5

SERVICIO
Fecha de la experiencia: Primera quincena de enero de 2011
Tarifa contratada: 1 hora = 200 euros/servicio + 29 euros/hora de la habitación = 229 euros/hora
Otras tarifas ofertadas: Consultar por teléfono
Duración real del servicio: 45 minutos
Besos/morreos? En la cara, los que quieras; en los labios, ninguno.
Francés/garganta profunda? (sin/con protección) Si, con.
Cunilingus? Se me quitaron las ganas. No
Sexo anal? No pregunté
Deja acabar en su boca/cara? No pregunté
Relato del encuentro: 4 amiguetes teníamos una celebración pendiente. El motivo, algo bueno, muy bueno, digno de organizar una buena comida y de acabar con 4 señoritas de una agencia como Bella Dona Girls. Con esa intención llamamos a Bella Dona, donde nos atendió una señorita muy simpática, que nos aconsejó según los distintos gustos de los 4 tíos que nos íbamos a dar el homenaje. Después de algún debate interno, nos decidimos por Judith, Andrea, Carlota e Isabel.

Llegado el día, y finiquitada la comida, un pequeño malentendido telefónico nos hizo temer que la cita con nuestras 4 damas su tuviera que cancelar. Solventado el susto, nos dirigimos rápidamente a nuestro destino de la calle Breda. Ya una vez allí, puntuales, nos esperamos 5 minutos en una pequeña salita a que llegaran 2 de las 4 chicas. La espera se hizo eterna!

Había llegado el momento, el encargado de los apartamentos acude a nosotros para acompañarnos cada uno a su habitación (no lo había dicho, pero no se trató de un 4x4, si no de cada oveja con su pareja...). Abro la puerta y allí estaba Judith. Al verla pensé: "Hoy he acertado" , tan contento como si hubiera acertado el pleno al 15 de la quiniela. Además, su acento pijito me volvía loco...

Nos desnudamos, ella a 2 metros de distancia. A mi me gustan los juegos eróticos ya de un buen inicio, desnudarnos mutuamente, pero no fue el caso. No le di más importancia, ya que yo ese día no estaba "a tope". Nos sumergimos en el agua del jacuzzi que ella había preparado, nos tocamos mientras hablábamos de manera agradable. Yo, deseoso de ir a la cama a dar rienda a la pasión, no aguanté mucho en el agua, así que nos secamos y a por faena!!! La faena fue corta, simple, sin ninguna pasión a la que dar rienda, sin morreos lujuriosos, con francés con gomita, ... Correcto, y ya es decir mucho, tanto que estando Judith tan buena como está, me costó 4 posturas correrme (yo cuento posturas, no tiempo ). Habían pasado apenas 35 minutos desde el inicio del servicio y ya tenía suficiente, no quería más. No negaré que yo, ese día, estaba algo tímido, pero la actitud fría de Judith no ayudó en nada a calentar el ambiente. No quiero cargar contra ella porque me pareció una chica simpática, con la que se puede hablar, agradable, pero por lo que pude deducir de sus palabras, solo se desata con los clientes habituales (de hecho, a mi me dijo que en futuras citas besaría mis labios).

Después de hacer una visita rápida a la habitación contigua donde estaban Carlota (físico: 6,5; implicación, por lo que después me contaron: 8) y uno de mis amigos, nos vestimos, nos despedimos y ella se fue. Yo esperé más de 10 minutos solo en la habitación, esperando a que la hora que habíamos contratado se consumiese.

Mientras esperaba a mis amigos en la recepción, pude ver a Isabel (físico: 8, pero totalmente diferente a Judith, con más pecho, en este caso natural, más bajita y no tan guapa de cara, aunque ni mucho menos fea; implicación: 5, se ve que lleva pocos meses en el negocio y aún no está del todo adaptada). Por lo que después me contaron, Andrea, la única chica que yo no vi, no estaba mal de físico y se implicaba bastante (el amigo que la cató, fue el que más contento salió).

Valoración de la implicación: 5. Prometía mucho y ofreció poco.
Valoración final: (lo mejor/lo peor) Lo mejor, su belleza, Lo peor, la poca implicación que demostró conmigo.

Imágenes Adjuntas

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Para conocer un poco mejor a Judith aqui tenemos sus fotos...

Agamenon

Bella Dona - Judith

CLIENTE
Edad del cliente: 38

LUMI
Nombre "artístico": Judith
Nacionalidad: (u origen probable) Española y catalana
Edad: (aparente y/o anunciada) 26
Descripción física: (¿fotos reales/retocadas?) Pelo negro, mirada profunda. La típica belleza española. Fotos reales aunque ahora está bastante más morena.
Valoración física de la chica: Muy guapa. Es alta, sobre 1,72. Tal vez demasiado culo, pero a mí me gustó.
Vestimenta: Vino con ropa de calle, pantalón vaquero y blusa.
Fumadora: Sí.

CONTACTO
Teléfono: 622573179
Web/Anuncio: http://www.belladonagirls.com/barcelona/
Dirección: (¿se aparca fácil?) Es una agencia. Las habitaciones son en hoteles.
Horario: De lunes a viernes.

LUGAR DE ENCUENTRO
Ambientación/decoración: El hotel por horas SuitsBarcelona en Rambla Cataluña 103.
Valoración: Depende de la habitación, pero por regla general están bien.

SERVICIO
Fecha de la experiencia: Creo que el lunes 23 de mayo al mediodía
Tarifa contratada: Una hora 200 € + 30€ la habitación
Otras tarifas ofertadas: Las que oferta la agencia en su web
Duración real del servicio: Una hora
Besos/morreos? Creo, sin saber, que le gustaba besarme. Me hago la ilusión.
Francés/garganta profunda? (sin/con protección) Con y no está mal.
Cunilingus? Abierta de patas... un coñín juguetón.
Sexo anal? No creo
Deja acabar en su boca/cara? No creo.
Relato del encuentro:

La ducha se rebelaba, hacía lo que le daba la gana. Me tocó una habitación del Suits Barcelona con una ducha individual parecida a las cápsulas del tiempo o hivernación de las películas de ciencia ficción. Es de plástico blanco, forma cilíndrica, con puertas correderas encalladas de cristal y para una sola persona. Un diseño futurista.
Yo estaba dentro, bastante a tono para empezar la fiesta. Sólo me faltaba la duchita previa. Judith estaba fuera de la ducha (no cabía dentro porque es muy pequeña) y al lado mío, también desnuda, intentaba dominar la puñetera ducha. Ella, simpática, al mando del control del agua; yo, del control de agua calinte o fría; y juntos, intentando conducir esa dichosa cápsula del tiempo.
Ahí siempre salía fría girase para donde girase (menos mal, porque para caliente yo). Ella movía el mando y salía el agua con ruidos gluturales por el sitio más inesperado: por el techo de forma difuminada (curioso), por las paredes, por cualquier sitio menos por donde queríamos, es decir, por la alcachofa de la ducha. Además, estaba el misterio. Por algún extraño motivo, se empeñaba en todas las opciones en sacar un chorro de agua por el lugar más insospechado y mojar siempre a Judith, que estaba fuera de la ducha, y no a mí. Al final, debió tener compasión, se dignó a sacar agua por la alcachofa y pude lavarme.
Terminada la ducha-lucha, me tumbé en la cama. Ella me siguió, se puso encima mío y comenzó besandome. Ponía su lengua en punta, como una lanza, y la movía dentro de la mía, buscando mi lengua. Sentía el gusto a tabaco de su boca, el sabor de su cuerpo moreno y la música de sus labios besuqueando mi rostro. Así unos tranquilos minutos, y después comenzó a bajar hacia el soldadito, con más ganas de guerra que los 300 espartanos juntos en la batalla de las Thermopilas. Me puso el condón y la felación siguiente no estuvo mal, en plan clásico. Se la metía en la boca, la chupaba con la lengua, subía y bajaba, y ya está. Tal vez eché en falta más juego, como hacerme miraditas, ayudarse con la mano, golpecitos con su lengua; ese tipo de juegos.
Judith quería empezar la juerga. Encima mío, se despatarraba para meterse el soldadito y empezar la primera batalla. Sus ojos negros son profundos, una maravilla abisal mirandote, escrutando mi deseo en el intante de la penetración. Le pedí que parase. No quería comenzar esa primera batalla, no sin antes abrirla de piernas y contemplar bien su sexo.
--A ver que sorpresa me vas a dar-- me comenta con sonrisa pícara.
Es pequeño, con sabor a frutas debido al Durex Lubrificante Sabor Piña. Me ayudé con los dedos, abrí los labios menores y pasé la lengua por su clítoris. Le metí un dedo y fui frotando. Ella, mientras, permanecía en silencio. Tenía la sensación de no provocar su excitación. Decidí pasar a la primera batalla.
El misionero. La fui embistiendo, y a la vez, besandola en la boca. Besos que ella gustosa devolvía. Aumenté el ritmo hasta cansarme. Fue el momento de cambiar a una postura que deseaba en cuanto vi su cuerpo desnudo.
A cuatro patas. Me encanta. Judith con la rodillas incadas en la cama, y ese culo grande, carnoso, en pompa, esperando con el coñito aún abierto de la anterior embestida. En cuanto la penetré, entré hasta el fondo, y mis caderas golpearon ese hermoso trasero, carne vibrante y ondulante a la embestida de mi miembro, me puse a mil. Seguí embistiendo, la sinfonía plaf-plaf característica del choque culo-cadera dominaba toda la habitación. Mientras, mis manos no pudieron resistir estrujar, apretar toda esa carne como si amasara pan. Sublime, pero todo se acaba.
Quería la portura de ella encima pero en el último momento cambiamos de nuevo al misionero. Esta vez, Judith subió sus rodillas y las colocó sobre mis hombros. Su coñito se apretaba contra mi miembro, además del placer de sentir el roce de su culo contra mis caderas. Aceleré el mete y saca para correrme. Ella me miraba cariñosa, no gemía ni gritaba de placer. Lo prefiero así, prefiero honestidad y si no sale de ella gemir o cualquier otra cosa pues que no lo haga. Me iba cansando hasta que paré sin correrme. Ella estaba sudando y yo dejé la postura casi muerto del esfuerzo y me tumbé en la cama boca arriba. Entonces fue ella quien pasó a la acción.
Judith me quitó el condón. Puso lubrificante al soldadito espartano y empezó a masturbarme con la mano. Para hacerlo más erótico, se puso de forma que sus tetas quedaban sobre mi cara. Así estaba yo, magreandole las tetas mientras ella hacía lo mismo con mi polla.
--Esto sí que lo notarás-- me comentó ella dandole al manubrio.
--Las tienes bastante duras-- yo comenté dandole a sus tetas.
--Hace poco me puse implantes de silicona.
Aunque sorprendido, no me importó su revelación. Estaban bastante bien. Los pezones son rosados y tiernos a mis labios. El tamaño es medio, lo cual me extrañó porque normalmente la mayoría de mujeres se ponen implantes de tamaño grande. En fin, son tetas.
Me corrí en su mano tan a gusto... y después estuvimos hablando tranquilos. Me contó un montón de cosas, cosas intrascendentes pero divertidas. Así supe que es una de las chicas más veterana de la agencia, que tiene la moto estropeada o que es licenciada en magisterio. Un encanto de mujer, cariñosa y a la vez fogosa pues, cuando faltaba un cuarto de hora para completar la hora contratada, me animó a echar un segundo polvo. Yo, incomprensiblemente satisfecho, estaba cansado, estaba bien así. Seguimos hablando. Cuando se terminó el tiempo, cada uno con su vida.

Valoración de la implicación: Buena.
Valoración final: (lo mejor/lo peor) Es simpática y atractiva y mira mucho por satisfacerte. Lo peor es que me faltó lujuria.