Cal i Gula

CHICA
Nombre "artístico": Clara Lluna
Nacionalidad: Catalana
Edad: Ya os la dirá ella, joven.
Fotos falsas o retocadas?: reales
Valoración de Cara: Guapísima
Valoración de Cuerpo: Espectacular
Valoración de Carácter: Increible
Vestimenta: Lo teneis que ver en persona

CONTACTO
Teléfono: 648949881
Web/Anuncio: http://www.sexomercadobcn.com/648949881/clara-lluna-catalana-solo-salidas-barcelona-648949881-a-t60591.html
Horario: por la tarde

LUGAR DE ENCUENTRO
Suites BCN

SERVICIO
Fecha de la experiencia: 08/04/2012
Tarifa contratada: 300€/h
Duración real del servicio: 1 hora larga, larga, aunque a mi se me hizo corta, corta
Relato del encuentro:

Dicen que la primera impresión es la que cuenta, y cuando hable por primera vez con Clara Lluna la impresión fue muy buena. Por la voz intuía una mujer dulce, cariñosa y alegre; y no me equivoqué.
Quedamos por la tarde en uno de esos apartamentos por horas, yo llegué un poco antes, subí y me acomodé en la habitación mientras la esperaba. Como toda dama que se precie llegó entre cinco y diez minutos tarde, realmente fue culpa del tráfico, pero mientras esperaba pensé que esos cinco o diez minutos de espera son sabrosos de disfrutar, pues empiezas a imaginar que posibilidades te da la habitación.
Y así pensando la espera se hizo bien corta y oigo que llaman a la habitación, abro la puerta y aparece ella. Enfundada en un vestido negro, ajustado, como hecho a la medida de su cuerpo, como cortado para ajustarse a cada una de las curvas que la naturaleza ha tenido a bien concederle a tal preciosidad. A parte una medias negras a juego, zapatos de tacón, tacones infinitos y de cara, una dulzura, unos ojazos y unos labios carnosos, os podéis imaginar la estampa, por un momento me detuve a mirarla y pensé "vaya monumento de mujer".

Nos saludamos, nos sentamos en la cama y entablamos una conversación, y en un momento dado me dice "¿que tal si llenamos el jacuzzi?" cosa que me pareció perfecta, y mientras el jacuzzi se iba llenando, y como al unísono, nuestros cuerpos fueron llenándose de placer.
Delicadamente nos fuimos desnudando y cada pieza que se quitaba sus formas eran más y más bellas. Su cuerpo es sencillamente increíble, pero un cuerpo es solo un cuerpo, y ella no solo es eso. Sus palabras son dulces, delicadas... sus movimientos suaves al principio, más salvajes luego. No podía evitar recorrer con mis labios todo su cuerpo y entonces nuestros labios se juntaron.
En ese momento empezó una amalgama de besos, largos, cortos, húmedos, secos,... nuestros labios parecían haber encontrado su media naranja y no paramos ni un instante de comernos, literalmente, los labios el uno al otro.
En este punto el jacuzzi había llegado a la mitad, y nosotros seguíamos besándonos. Nuestros cuerpos yacían ya desnudos, bueno ella se había dejado las medias puestas y tampoco se las quería quitar me gustaba verla así. Entonces con los labios húmedos bajo suavemente por mi cuerpo y me dedicó un francés sublime, simplemente genial, no lo puedo explicar, hay que vivirlo.

Entonces me dí cuenta que la bañera ya estaba llena, y parecía que tanto la bañera como yo íbamos a explotar al mismo tiempo... pero quería dedicarle más atenciones a tal bella dama. Paramos el agua y empecé a lamerle todo el cuerpo, y que cuerpo, que pechos, que piernas,... que culo! Su culo es mención a parte, para mí es simplemente perfecto, redondo, duro pero suave al tacto.. me enloqueció. Y llegué a su tesoro, dulce y suave y con el color de las fresas. En ese punto de excitación me estiró, me enfundó y se sentó encima... después de unos instantes, le dije que se pusiera a cuatro patas y enloquecí con la visión de su culo, mi sexo y el suyo luchando en una lucha de placer y mis manos agarradas a esas dos nalgas perfectas. Quería explotar dentro de ella, pero también quería volver a saborear su francés. Me estiró y me dijo "déjame a mi".
Me comió de tal forma que exploté en su boca, no puedo poner palabras porque no las encuentro.

Nos fuimos al jacuzzi, y estuvimos unos instante charlando, y tomando un agradable baño. La abracé y daba gusto tenerla en brazos, tan dulce y tan salvaje al mismo tiempo. Salimos del jacuzzi y le dije que quería saborear su cuerpo cada recoveco, cada trocito... y entonces me dediqué a darle placer. "No hay placer recibido que no haya sido dado, y el mayor de placer de todos es el provocado"... o es lo que yo pienso y siento.
Me comí todo su cuerpo, con dulzura y pasión, oyendo sus gemidos y notando cuando su cuerpo se estremecía de placer... y entonces la perdí.

Perdí la noción del tiempo, saboreando su cuerpo vi el reloj, o me miro él, y solo quedaban 10 minutos de la habitación y ya había acabado el tiempo pactado entre los dos. Se lo dije, ella me estiró y me pregunto si podría comerme otra vez, y vaya si pudo. Me hizo otro francés sublime, con esos labios, con esas manos, con esa lengua,... volví a explotar, y por un momento sentí la "petit mort".

Nos duchamos, nos vestimos, charlamos, nos dimos varios besos más, nuestros labios no dejaron de buscarse durante todo el tiempo.
Lo dicho... no solo es un cuerpo, es mucho más, es conversación, elegancia, dulzura, pasión, amabilidad, timidez, desenfreno,...

Finalmente nos despedimos.

Valoración de la implicación: 10
Valoración final: lo mejor: Todo / lo peor: Que se acabó... (pero continuará)

Imágenes Adjuntas

guest

Clara Lluna - Catalana ......

Imágenes Adjuntas

Whisper1992

Una Noche en Sevilla con Claralluna y con Lucia

Soy hombre, y como tal siempre he tenido la fantasía de compartir cama con dos mujeres simultáneamente. Creo que pocos hombres escapan de esta fantasía. Los hombres la llevamos "de serie" al salir de la cadena de montaje.

Tras varios intentos fallidos con escorts, en los que me llegué a sentir parte de una producción porno barata de serie B, tuve hace tiempo dos encuentros con una pareja de jóvenes lesbianas. Eran una pareja en la vida real, había mucha química entre ellas, química de la que me contagié, en la que me disolví lentamente, y con inmenso placer.

Llegué a la conclusión de que, para un hombre como yo, una de las experiencias más bonitas que se pueden vivir es ver a dos mujeres entregándose una a la otra, totalmente, sexualmente, y con amor. Y participar en ello si a ellas les parece bien.

…

Conocí a Claralluna de Barcelona hace algunos meses. De todas las escorts que he conocido, Clara es de lejos la mujer de la que me siento más cercano, en lo físico, en lo sexual, y en lo "espiritual". Diría que somos amigos, y de no ser por el riguroso intercambio monetario, hasta diría que somos amantes. Quiero mucho a esta mujer. Hasta nos llamamos el uno al otro con apodos ridículamente deliciosos. Como "mi pichoncito", pero en mejor.

Conocí a Lucía de amigasdesilvia hace unas semanas, en Sevilla. Fue solo un encuentro, dos horas robadas a la rutina diaria, pero fue un encuentro que me marcó. Aparte de tener un físico como a mi me gusta, y mucho, Lucía me pareció una persona auténtica, real, que como yo vive el momento con intensidad. Disfruté muchísimo de aquella cita con ella.

Tanto Clara como Lucía son personas risueñas, alegres, y entregadas.

Tanto Clara como Lucía me tienen embobado con sus miradas. Ojos preciosos, miradas francas y directas, sinceras. Ojos que me dicen que les estoy gustando. Me enamoré instantáneamente de Clara cuando le vi por primera vez, por su mirada. Lo mismo me pasó con Lucía.

Hacía tiempo que estaba buscando una escort para poder vivir un trío con Clara, pues Clara es totalmente bisexual y había compartido conmigo su fantasía de quedar con una mujer y conmigo.

Cuando conocí a Lucía le pregunté si le gustaban las mujeres. Al contestar afirmativamente, me di cuenta que un encuentro con Clara y Lucía simultáneamente podía funcionar, y muy bien.

Es más, no descansaría hasta conseguirlo!!!

Tuvo lugar hace unos días, en un hotel de Sevilla. Clara aceptó acompañarme desde Barcelona, elegí una habitación espaciosa y con cama extra-grande, y a las diez de la noche llegó Lucía, puntual, sonriente, espontánea, preciosa. Fue desde un primer instante como una reunión de tres amigos, cordial y natural. Charla, café, y miradas cruzadas. De lo primero que dijo Lucía es que Clara le parecía guapísima. La verdad es que estaban las dos bellísimas, y sólo de estar allí con ellas dos, con aquellas dos miradas de fuego, yo ya estaba tocando el cielo.

Eché de menos no tener cuatro ojos, para poder mirar fijamente a las dos, al mismo tiempo.

Mientras tomábamos algo y charlábamos animadamente, tuve que ausentarme de la habitación un momento para hacer una llamada. Las dejé sentadas en el sofá, lado a lado, a una distancia normal "protocolaria" una de la otra, con Lucía inclinada hacía Clara, y Clara, más tímida, ligeramente inclinada hacia el otro lado.

Cuando regresé al cabo de quince minutos, la distancia se había reducido a casi nada, Clara ya no mostraba signos de reserva, estaban las dos inclinadas, casi recostadas una contra la otra, y me dijeron con idéntica sonrisa, entre irónica y tierna, "Estábamos precisamente hablando, mal, de ti".

Ó momento inolvidable!

Sublime fue el instante en el que ambas, ya de pié, acercaron sus cuerpos, se abrazaron, y empezaron a besarse. Lentamente y suavemente. No fueron estos besos de películas porno, lenguas fuera, con rugidos felinos. Fueron besos cándidos, interiores, labios apretados contra labios. Pude escuchar como sus respiraciones iban subiendo en ritmo, y sentí como la temperatura de la habitación subía. Yo me sentía casi fiebroso.

Al tiempo que se besaban y abrazaban, las manos de cada una empezaron a acariciar al cuerpo de la otra, por encima de la ropa, muy suavemente. Clara y Lucia estaban sincronizadas en su ritmo, en la velocidad de la caricia, en la presión sobre el cuerpo de la otra. Sus respiraciones se iban haciendo más profundas y rápidas.

Yo estaba a poca distancia, mirando, admirando, paralizado por la magia del momento, ya con fiebre alta, inmóvil, temeroso de romper el momento aunque sea con un leve movimiento.

Poco a poco las prendas de cada una fueron planeando a través del aire de la habitación, desnudando estas pieles maravillosas, descubriendo paso a paso sus cuerpos perfectos. Pero esto nunca ocurre como en las películas, siempre se resiste un puñetero sostén (me hizo gracia ver que no solo a mi me cuesta desabrochar el sostén de Clara, a Lucía también le costó un poquito!!!), siempre hay un tropiezo quitando una bota, y el silencio contemplativo y taquicárdico del momento se rompió con unas risas ligeras, cómplices.

Yo seguía de espectador cercano, arriesgando aquí y allá una caricia, sin querer inmiscuirme demasiado en un instante que era de ellas y solo de ellas. Así me lo había propuesto al organizar la cita. Primero ser mirón, luego participar.

Las dos ninfas acabaron tirándose desnudas en la cama, entrelazadas, y empezó una escena de altísima carga erótica que recordaré toda mi vida. A cámara lenta. Me faltan palabras para describirlo adecuadamente. Caricias suaves pero de una intensidad nunca vista, los ojos medio cerrados de las dos, con expresión de concentración y de goce, los cuerpos ondulantes pegados uno contra otro, el pelo de Lucia sobre los pechos de Clara. La boca de una que se acerca al pubis de la otra, los gemidos gradualmente más profundos de una parte y de otra, los dedos de las dos que poco a poco muestran más atrevimiento, todo ello me tenía subyugado.

Yo estaba estirado desnudo al lado de ellas en la cama. Bien cerca. Dejando mis manos pasearse por estos dos cuerpos dedicados el uno al otro, cuerpos que estaban ignorándome. Pero en algún momento Lucia me cogía la cabeza y la atraía hacia la suya para que le dé un beso, apretado. Y Clara cuando se dio cuenta de mi presencia cercana también me empezó a acariciar. Pero yo quería sobre todo verlas concentradas una con la otra.

Raras veces me he sentido más profundamente feliz que cuando estas dos increíbles jóvenes mujeres llegaron mano en mano al orgasmo. El mundo ya se podía acabar que yo ya había alcanzado el Nirvana. Realmente.

Llegaron de forma diferente. Clara tiene un orgasmo explosivo, exterior, expansivo, su grito de placer es un largo llanto como de sirena de ambulancia, conmovedor, en el que parece que se vacía hasta el ultimo centímetro cubico de aire de sus pulmones. Lucia en cambio se corre de manera mas interior, con un gemido que parece una aleteo de pájaro, con una contracción de todos los músculos de su cuerpo, una implosión, una explosión hacia dentro. En lugar de vaciarse parece que se esté llenando de todo lo que la rodea.

Clara y Lucia corriéndose. Alucinante.

Siempre me ha sorprendido la capacidad de recuperación de las mujeres tras el orgasmo. Mientras yo yazgo palpitante durante unos minutos, drenado de toda energía tras la explosión, una mujer puede levantarse inmediatamente como un muelle, llevar el condón usado a la papelera, salir corriendo a lavarse, buscar febrilmente un cigarro en su bolso…

Aquel día, Clara y Lucía, tras llegar una con otra al Placer, cada una a su manera, enseguida se levantaron riendo, y se abalanzaron sobre mi. Dulcemente.

…… …… …… …… …… …… …… ……

A cada vez que he intentado relatar, escribir sobre un encuentro con Clara, siempre me ha pasado lo mismo. Me siento inspirado para escribir, pero no encuentro las palabras. Hacer una descripción gráfica o cinematográfica de la consumación del acto sexual con Clara no le haría justicia a las sensaciones experimentadas en la intimidad con esta mujer. Estas sensaciones son variadas, complementarias, muchas veces contradictorias. Cuando hago el amor con Clara, se entremezclan una gran excitación febril con una gran paz interior. Y estas dos sensaciones se fusionan de forma inesperada al llegar al orgasmo. Es bestial, gigantesco.

Cuando Lucia colocó el preservativo de color rojo sobre mi masculinidad erguida, Clara enseguida le preguntó por el olor afrutado del látex. Entre risas, por un minuto estas criaturas celestiales hicieron de mi un Pirulito de Fresa.

Tener a Clara y a Lucía ya pendientes de alcanzar el placer conmigo, disfrutando ahora a fondo de su heterosexualidad, fue indescriptible. No hay palabras. Hay imágenes y sensaciones formando un bonito caos en mi mente. Recuerdo sobre todo haber lamentado no ser realmente un pulpo, no tener muchas manos para tocar, acariciar y agarrar estas dos criaturas celestiales, a la vez. No tener dos penes para penetrarles al mismo tiempo. Dos bocas para besarles. Cuatro ojos para mirar a cada una, sin parar.

Coitos arriba, coitos abajo, abrazos pubis contra pubis, coger de la mano las caderas de Clara, coger de la mano la nuca de Lucia, episodios de francés, entreabrir los ojos en pleno preámbulo de apogeo para descubrir que aunque dedicadas a mi cuerpo se siguen también mimando la una a la otra…

la excitación que sube hasta niveles desconocidos…

Es más, mucho más que morbo…

Y llega la Pequeña Muerte a cámara lenta. Pequeña Muerte inmensa, infinita.
...
Por poco no me desmayo.
...

En la cama grande acabamos acurrucados los tres, tendidos bajo el edredón, compartiendo este instante único de intimidad, el que sigue al Amor. Los ojos de Clara y de Lucia brillaban en la penumbra relativa de la habitación. Era el momento de las confidencias en voz baja, cumplidos cruzados, silencios cómplices. Eran ya pasadas la medianoche, tuve que volver a ausentarme unos minutos, y ver a Clara y Lucia juntas desnudas en la cama susurrándose cosas entre risitas, esta imagen me quedará grabada en la mente, para siempre.

…
Hubo más Amor, más risas, más sexo, más Pequeña Muerte, con el mismo envoltorio de ternura, dulzura, sensualidad. Siento que tanto Lucia y Clara son proclives a poder disfrutar de sexo intenso, quizás hasta duro, pero conmigo fue todo como me gusta: Despacio, paso a paso, sin perder los estribos o volverse locos, al menos hasta muy cerca de la línea de meta. De la explosión de meta. Sensualidad ante todo. Intensidad por subida gradual del deseo desde la sensualidad.

Sobre la una y media de la mañana, se había acabado el tiempo para Lucia, le acompañé a la planta baja del hotel, y le pedimos un taxi al recepcionista de noche del hotel.

Un chico simpático y servicial. Pude fumarme un cigarro con Lucia antes de llegar el taxi. Lucia me obsequió con un abrazo descomunal, unas palabras de aprecio que guardo para mi, se sentó en el taxi en el asiento del pasajero/copiloto (vaya suerte tiene el taxista , y desapareció en la noche por las callejuelas del Barrio de Santa Cruz.

Volvía a la habitación donde Clara esperaba sonriente, duchada y enfundada en un albornoz blanco mullido, casi peludo. Clara es una mujer mas bien pequeña, "pocket" es la palabra que usa ella, y se veía guapísima vestida de Yeti, el Abominable Hombre de las Nieves.

Clara y yo pudimos seguir entregándonos el uno al otro, hubo más gemidos, más sudor, hubo más pequeña muerte, ¡como disfruto yo de esta mujerzuela feliz y entregada al momento! Hasta que caímos rendidos, inconscientes. No sé muy bien a qué hora fue esto.

El despertador sonó sobre las 7.30 de la mañana, le tocaba a Clara marcharse al aeropuerto. Nos vestimos, y la acompañé hasta la planta baja del hotel. El recepcionista de noche seguía allí, le pedí "un taxi para mi amiga", pocas horas después de habérselo pedido para Lucía. Recomiendo que se le dé una medalla a este hombre, pues si quedó alucinado, no lo dejó ver ni entrever ni un momento. Se mantuvo cortés, hasta amable, y muy profesional.

Abrazos sentidos, besos sentidos, un "hasta pronto" y palabras más intimas que aquí no contaré, y hete aquí a Clara que también desaparece en un taxi por las callejuelas de Santa Cruz.

Volví al hotel, intercambié un saludo amable con el recepcionista de noche, que mantenía su actitud super-profesional, volví a la habitación, me metí en la cama impregnada aún de los olores de mis dos ángeles traviesos, y me dormí como un niño, la boca abierta y el hilo de baba bajando por la barbilla.

Exausto e inmensamente Feliz.

Tubabu

Una noche cualquiera

CLIENTE
Edad del cliente: 35

CHICA
Nombre "artístico": Clara Lluna
Nacionalidad: (u origen probable)Española
Edad: (aparente y/o anunciada) 27
Fotos falsas o retocadas?: No
Valoración de Cara: Muy guapa
Valoración de Cuerpo: Excepcional
Valoración de Carácter: Bueno
Vestimenta: Arreglada pero informal
Fumadora: Ni de coña

CONTACTO
Teléfono: 648949881
Web/Anuncio: http://www.sexomercadobcn.com/648949...-a-t60591.html
Dirección: (¿se aparca fácil?) hotel
Horario: Amplio

LUGAR DE ENCUENTRO
Ambientación/decoración: Bueno, lo elegí yo
Valoración: 8

SERVICIO
Fecha de la experiencia: Marzo 2013
Tarifa contratada: Una noche (1.300)
Duración real del servicio: Una noche larga, larga.

Relato del encuentro:

Ya ha pasado un mes, y parece que fuera ayer. Aún guardo la frescura de su piel junto al recuerdo de unos ojos marrones que me robaron la razón. Hoy creo justo compartir con todos los presentes esta experiencia, para en primer lugar dar envidia a todos, y por otro lado, por si hay valientes de este lado del muro, dispuestos a arriesgarse a lidiar con semejante mujer.

El encuentro fue una auténtica cita a ciegas. Yo no sabía nada de ella, ella no sabía absolutamente nada de mí, y con un par, se cogió un avión para plantarse en Madrid y conocer a este impresentable. Tras un viaje un tanto accidentado, tuve la suerte de apreciar como en la T4 de Barajas, se iba haciendo el silencio conforme una guapa morenaza traqueteaba con sus tacones y sus gafas. Su abrigo apenas insinuaba el cuerpazo que había bajo él. Hacía frío y toda precaución era poca, pero aun con todo, Clara causaba sensación (poco después descubriría que el punto fuerte de clara es subir la temperatura en todos los aeropuertos) a su paso.

La cita no había comenzado bien, pero se torcería aún más cuando empezamos a ver las dificultades en cenar a tan altas horas de la noche en la periferia. Al final nos dieron algo en un italiano relativamente cercano al hotel y allí, en aquella mesa pude disfrutar con una chica francamente interesante. Clara tiene una cara muy armoniosa y bastante atractiva. Con unos preciosos ojos castaños, que, si te fijas bien, están sesgados en dos zonas de distinta tonalidad. Su melena es larga y sedosa, de un castaño oscuro. Lisa y muy cuidada. En general tiene unas facciones muy harmoniosas y una cara muy riquiña. Con un gesto mezcla de picardía y de cierta timidez.

Una vez en el hotel, me llevé dos grandes sorpresas, la primera, cuando Clara menguó hasta su tamaño real a una altura más propia de una chica que cuando, encima de sus tacones, estaba a la par conmigo. Pobres pies pensé. La otra, cuando salió de la ducha tal cual la trajeron al mundo y pude disfrutar del cuerpo más impresionante que jamás haya visto. Tiempo después la calificarían en una tienda de Madrid como una chica con cuerpo de muñequita, y la dependienta desde luego que se quedó corta. Delgada pero con curvas. De hecho, para mi gusto un poco sobrada de pecho, pero conforme bajabas la mirada, te ibas quedando con la boca abierta. En primer lugar la cintura es realmente estrecha, lo que remarca aún más la forma de su cadera. Las piernas, lisas y largas no tienen una imperfección. Y si se da la vuelta, si se da la vuelta muestra todas sus cartas con ese as que es su trasero. Menudo culo. Perfecto.

En plazas así no es fácil torear. Pero desde el primer momento clara me lo puso bastante fácil. Su naturalidad hace que no pierdas la compostura y su gracia y su timidez, igualan la situación, quitándote todos los nervios. En la cama conmigo fue muy mimosa. Claro que es lo que le había pedido yo. Cuidadosa, tierna y muy comedida, algo que se agradece cuando tienes una noche por delante, y al día siguiente pretendes hacer algo en el trabajo. En ningún momento parece lo que en verdad es, dándole un toque de naturalidad, que personalmente agradezco en estas situaciones. Conmigo no fue en ningún momento de pornostar, y aunque no lo pueda asegurar, me temo que no es su perfil más favorecedor. Le viene mejor el papel de novieta tímida que se destapa cuando se baja la intensidad de las luces.

Ha pasado ya un mes y a duras penas soy capaz de recordar mucho de lo que sucedió. Recuerdo que su boca era encantadora. Recorriendo cada recoveco de mi cuerpo. Surcando cada rincón de mi boca. Dándome placer sin tregua. También recuerdo cuando se subió encima de mí y comenzó a moverse rítmicamente, con tanto cuidado que cuando me quise dar cuenta, empecé a notar lo húmeda que estaba y lo cerca de terminar la noche que a mí me tuvo. De lo demás solo recuerdo retazos. Pequeñas imágenes. Sensaciones. Todo muy etéreo. Solamente sé, que todas las dudas que pudiera tener respecto a Clara, se me disiparon esa noche. Porque además de excelente amante, Clara te proporciona una conversación de lo más agradable (siempre que no quieras dormir). Por decirlo finamente, no se calla ni debajo del agua, y yo que también disfruto de la noche, como noctámbulo que me declaro, aquella noche nos dieron las diez y las once, y las… Cuando nos subieron el desayuno a la cama y fui consciente de que en lugar de acercarle al aeropuerto me tenía que ir pitando a la oficina sin haber dormido ni tan siquiera un minuto, me asusté ante la perspectiva de un duro día de trabajo en el que ni la tontorrona sonrisita que Clara me dejó, me ayudaría a mantenerme despierto.

Un pajarito me contaría que su retorno a la Ciudad Condal también fue accidentado. Cosas del destino que le empujarían a sufrir una segunda noche de insomnio a la que casi no se repondría. Yo por mi parte una vez rendido a sus encantos, me propondría disfrutar junto a ella de una semana inolvidable en el paraíso. Pero eso es otra historia y será contada en otra ocasión.


Valoración de la implicación: 9
Valoración final: (lo mejor/lo peor) Lo bien que me lo pasé / Fue tan bueno que pasó volando

jaaan

Una cita necesaria



CLIENTE
Edad del cliente: 33

CHICA
Nombre "artístico": Clara Lluna
Nacionalidad: Catalana
Edad: Joven.
Fotos falsas o retocadas?: Reales
Valoración de Cara: Es totalmente subjetivo, pero toda ella es una chica muy dulce.
Valoración de Cuerpo: Perfeco si no es un problema la cirugía , que en mi caso no lo es.
Valoración de Carácter: Muy dulce, tranquila, siempre sonriente, servicial.
Vestimenta: Impecable.

CONTACTO
Teléfono: 648949881
Web/Anuncio: http://www.sexomercadobcn.com/648949...-a-t60591.html
Horario: por la tarde

LUGAR DE ENCUENTRO
Apartamentos Oceanía

SERVICIO
Fecha de la experiencia: Finales de invierno
Tarifa contratada: 300€/h + apartamento 57 €
Duración real del servicio: 1 hora larga
Besos/morreos? Sí. Besos dulces, como no!!, sin regalarse con su lengua.
Francés/garganta profunda? Sí, sin pero sin llegar a Gp.
Cunilingus? Sí, xoxete lindo, perfecto como todo su cuerpo.
Sexo anal? No.
Deja acabar en su boca/cara? Si boca, pero en la cara lo desconozco
Relato del encuentro:
Habíamos hablado varias veces y su vocecita me tenía enamorado, finalmente, a última hora y con prisas quedamos una tarde en Oceanía.
Nervios iniciales, duchita, besitos y a la cama. Francés, cuni cuni , condón y a jugar!!!
No soy de dar muchos detalles pero me regaló dos servicios donde pude hacer lo que quise disfrutando de una chica con un cuerpo perfecto y un carácter supersuave. Gràcies per ser tan i tan dolça :kiss2

Valoración de la implicación: 9
Valoración final: lo mejor: Su cuerpo, el cariño que transmite y de nuevo su cuerpo. / lo peor: Que es un placer demasiado lujoso.

Abalon69

foto actualizada



Una de las últimas fotos de Clara Lluna

Imágenes Adjuntas