Gundisalvus69

CHICA
Nombre "artístico": Amanda
Nacionalidad: brasileña (puede que nacida aquí, no conserva acento carioca)
Edad: No lo sé exactamente, seguramente es veintiañera, si me dicen que tiene 18 me lo creo
Fotos falsas o retocadas?: En cuanto pueda las subo
Valoración de Cara: 10
Valoración de Cuerpo: 10
Valoración de Carácter: 10
Vestimenta: 8, top negro con poca tela y minifalda negra que trasparentaba un poco el tanga negro
Fumadora: No, no le pregunté, pero su aliento era fresco y olía bien

CONTACTO
Teléfono: 932014491
Web/Anuncio: En cuanto le preparen la entrada en la Vie En Rose la pongo
Dirección: Calle Rector Ubach 46, muy cerca de la parada Muntaner de FCG, se puede encontrar aparcamiento con algo de paciencia
Horario: Yo me la encontré de madrugada

LUGAR DE ENCUENTRO
Ambientación/decoración: Ese local está muy bien, la suite en la que estuve tenía una ducha espectacular y un espejo en un lateral de la cama. Lo malo es que dicha cama estaba encajonada entre 3 paredes
Valoración: 9,5

SERVICIO
Fecha de la experiencia: 06/08/2014
Tarifa contratada: Una hora por 150 €.
Otras tarifas ofertadas: Tenía muy claro que quería una hora y no di pie a que me las dijeran.
Duración real del servicio: Una hora y unos minutillos extra
Besos/morreos? Se dejaba besar por todo el cuerpo. Poquitos en la boca, ella daba algunos besos tímidos.
Francés/garganta profunda? Empezó con francés sin, pero rápidamente pasó a con. Sin GP
Cunnilingus? No
Sexo anal? No
Deja acabar en su boca/cara? No pregunté
Relato del encuentro:
Iba yo más caliente que el palo de un churrero paseando de madrugada por la Diagonal, llevaba rumiando si
ir o no a La Vie en Rose u optar por algo más económico. Al final decido ir allí porqué la anterior vez que fui había mujeres realmente guapas y me apetecía algo especial.

Esa noche estuve de suerte, había muchísimas mujeres y todas despampanantes; desfilaron ante mi más de diez, creo. Sin embargo, me llamó mucho la atención Amanda y me decanté por ella. Lo malo es que se me olvidó su nombre, dije "Ana" y otra pobre chica se llevó un chasco pensando que sería ella la escogida. Tuve que asomarme al pasillo y decir "La de la faldita blanca".

Amanda lucía un tipo espectacular de adolescente, delgada y de maneras sexys. A su cuerpo no le sobra ni un gramo; es menuda, de un 1,65 m diría. Tiene una piel canela muy apetecible. Quizás no tenga la voluptuosidad típica de las cariocas, pero ni falta que le hace. Sus pechos son pequeños pero tersos y firmes, con unas aureolas de tamaño ideal del color del chocolate negro, rodeando unos pezones gorditos muy ricos. Su cinturilla de avispa da paso a un culo respingón, con unas nalgas creadas para dejarse agarrar. Sus ojos son grandes y bonitos, de color negro, su naricilla pequeña y bonita, sobre unos labios carnosos muy deseables. Cuando te folla y te mira a los ojos, te derrite el alma.

¡Ahora viene el sorpresón! ¡La pobre anda perdidísima porqué es su primer día en el negocio de la prostitución! Charlamos un par de minutos, me dice que le han dicho que primero se cobra y que tengo una consumición gratis, a mi se me corta el rollo un poco y empiezo a dudar de si he escogido bien . En serio, estaba muy nerviosa, me pregunta qué quiero beber como cuatro veces antes de salir al pasillo a pedir la bebida y conseguir condones. Cuando vuelve a los 5 minutos, me vuelve a preguntar qué quería beber otras tantas veces, que se le había olvidado por culpa de los nervios.

Por suerte, viendo el panorama, yo ya había puesto la sábana a la cama y estaba presto para tomar una ducha, la chica se queda mirando cómo me lavo. Ella, siempre consciente de su inexperiencia y con una sonrisa, reconoce que no sabe muy bien cómo empezar. Yo le explico un poco, que primero se suele cobrar al cliente, luego se toma nota de la bebida, que ella tiene que poner la sábana (yo siempre les ayudo) y luego propone al cliente tomar una ducha juntos o como mínimo que le deje lavar sus partes. También le indico que cada chica se suele traer sus condones y un lubricante, ella socarrona y divertida me dice que no le hace falta ningún lubricante. Se lava ella sus partes, nos tumbamos en la cama y empieza la sesión de sexo.

Me pregunta si quiero que ella me la coma, le digo que por supuesto. Yo le pregunto que si le gusta que le laman la almejilla, me dice dubitativa que "depende de como se lo lama", como no la veo segura decido no forzar y dejarla que ella haga. Al principio parece que vaya directa a chupar sin, yo le indico que muchas no lo hacen sin, y que aunque a mi me guste sin condón que ella se lo ponga si se siente más segura. Al final me chupa un poco sin, pero enseguida le digo que quiero que me monte y ella me pone el condón un poco torpemente y me cabalga.

Por suerte para mi, se me van todas las dudas. Es una chica que folla como a mi me gusta y es más desenvuelta de lo que indicaban sus titubeos iniciales. Le gusta mucho follar apretando su pelvis a la mía, bien frotado de atrás a adelante, alternando con unos pocos saltitos . Yo la agarro de sus caderas con esas deliciosas y suaves nalgas y la apreto acompasadamente contra mi. Le encanta follar así y creo que se corre en los primeros envites, tras los cuales el ritmo baja unos minutos, luego vuelve a subir y así un rato. Ella se tumba sobre mi lo suficiente para que yo le bese el cuello y le lama los pechos, se vuelve a poner erguida y yo le estrujo las tetas y le paso las manos por las costillas y la cintura. Noto humedad en mi zona púbica y se oye ese ruido a chancla corrida.

Acto seguido me dice que le apetece a cuatro patas, descansamos un rato, y me lanzo a ello. Arremeto sonoramente contra su trasero pero enseguida me canso muy rápido (siempre me pasa joder). Volvemos a descansar y empezamos con el misionero, ella muy flexible estira sus piernas por encima de mis brazos.
Hago que el colchón bote, ella me indica que le gusta, así rápido, sigue, sigue... Me vuelvo a cansar (nooooo). Vuelvo a descansar. Hago que se ponga de lado y lo intento otra vez, veo que necesito descansar más y beber un poco. Malamente cuando me desfondo así, ya que me cuesta horrores correrme luego.

Me la chupa otro poco y vuelve a cabalgarme de la misma manera, cosa que me encanta. Yo le voy diciendo cochinadas y ella entra al trapo poniendose cachonda y preguntándome qué más cosas le haría. Le encanta que le lama las tetitas. No sé si se corrió más veces pero se nota que disfruta como una posesa.

Quizás debido al cansancio no consigo correrme con facilidad , le digo que provemos con una paja, ella se empieza a masturbar mientras me mira como me pajeo. Yo sibilinamente retiro su mano y situo la mía en su sexo y ella agarra mi pene y nos marturbamos el uno al otro. Ella se estremece un poco y me dice que pare ya y se queda tumbada apretando los muslos entre sí con una carilla de gusto angelical . Yo intento acabar mi paja mientras ella continua mirándome de manera lasciva, se acerca la hora y no llego al climax. Al final ella me dice que si he disfrutado, que si lo ha hecho bien, yo le indico que he disfrutado muchísimo y que lo ha hecho demasiado bien, pero que a veces me pasa que es culpa mía que no me corra .

Ella empieza a vestirse en plan striptease al revés, yo la miro sacudiéndomela como nunca y finalmente consigo soltar tres borbotones de leche enormes . Creo que nos pasamos de tiempo por unos minutillos.

Valoración de la implicación: 10, siempre intentando complacer y aprender un poco, lo cual le confería un cierto aire a colegiala. Quizás no se deje hacer de todo, pero mostró muy buena actitud
Valoración final: 8, mi preocupación para correrme es lo que lastró el encuentro. La inexperiencia de Amanda al final no importó demasiado. Lo mejor es su belleza y su manera viciosa de cabalgar.